La tarde de ayer vi por primera vez un programa llamado “The big bang theory”, tal vez debido al título pensé que podría tratarse de los últimos adelantos sobre esta teoría, pero me encontré con la sorpresa de que el argumento es muy simple: cuatro amigos, intelectualmente superiores pero incapaces de conectar socialmente, adictos a la tecnología y a cuanta frivolidad posible (adictos a los comics, Star Trek, series de los ochentas) y al frente tienen a una atractiva vecina con la cual la serie toma un poco más de acción y entretiene con las divertidas posibilidades de estos nerds. A pesar de ello, los chistes son excelentes ya que tienen un toque inteligente, particularmente en sus cuatro personajes centrales se puede descubrir una inhabilidad social que contrasta con una inteligencia por encima de la media. Sheldon es el perfecto ejemplo de un comportamiento esquizofrénico ya que prefiere la soledad a cualquier otra situación de interacción. Altamente frágil y lleno de enfermedades ya que está necesitado de atención por lo que en su total desconexión con el mundo sexual, prefiere los “placeres más elevados de la mente.” Howard está anclado en la estética de los sesenta y se aproxima a las mujeres de forma sexualmente desagradable cayendo en lo vulgar, y con lo que intenta compensar su falta de atractivo. Rajesh gracias a un problema de mutismo selección no puede relacionarse con ninguna mujer y su solución es el licor para que su inhibición desaparezca y pueda mostrarse espontáneo e incluso atrevido con ellas, lo interesante es que lo logra ya que es el que más éxito tiene con las mujeres, que lo aprecian misterioso, pero no puede capitalizarlo. Finalmente Leonard es el típico caso de un hombre nervioso frente a las mujeres, con charlas demasiado elevadas y científicas cuando está con ellas y una imagen débil de sí mismo por el rechazo social al que ha sido sometido, a su baja estatura. Sin embargo tiene una virtud: la perseverancia ya que esta hace que pueda iniciar una irregular relación con una chica llamada Penny. Al final pase un tiempo muy divertido así que se la recomiendo hipotético lector para una tarde que no tenga nada que hacer y le esté cambiando de manera intermitente a los canales en el televisor…
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